Ayer lunes, un trabajador falleció en un siniestro laboral en Auntzeta, Altsasu (Nafarroa). El operario, un logroñés de 45 años, se encontraba realizando trabajos forestales, concretamente en la tala de árboles, cuando una rama le cayó encima poco después de la una del mediodía. Perdió la vida en el acto.
Han pasado casi seis meses desde el inicio del año y, según fuentes sindicales, al menos 29 trabajadores han perdido la vida en Euskal Herria en el trabajo, de camino al trabajo o de regreso a casa.