El agitador fascista afirma en una entrevista que "empresas y empresarios" apoyan su causa, pero evade nombrarlos: "No tengo por qué dar ninguna explicación".
La investigación abierta tras una denuncia de la Comunitat Palestina de Catalunya y la Campaña Fin al Comercio de Armas con Israel abre un incierto precedente.
Los nuevos planes de "paz" esconden grandes fines corporativos que empiezan a tener nombre propio, con BlackRock y Goldman Sachs esperando recoger los frutos de los bonos de guerra israelíes adquiridos en el genocidio.
La empresa cree que construir el tranvía de Jerusalén "no vulnera derechos humanos"; la ONU sitúa a CAF en el puesto 38 de las empresas que se enriquecen con los crímenes israelíes.
El Ejecutivo concede a la empresa un préstamo milmillonario sin intereses, con fondos extraordinarios fuera del presupuesto habitual que se añaden al notable aumento del gasto militar.
El hijo de los dueños de la pastelería La Suiza acumula un historial público con numerosas disputas legales y profesionales cuestionadas, y lidera ahora la estrategia contra las sindicalistas encarceladas.
La salida de la CEO coincide con la polémica por mensajes racistas generados por la IA Grok, aunque Yaccarino no menciona el incidente en su despedida.
Documentos internos muestran propuestas para crear una "Riviera de Gaza": islas artificiales, blockchain, zonas francas y expulsión de medio millón de palestinos.
