Ayer, 29 de enero, la intervención policial en el desalojo del edificio de l’Antiga Massana y la posterior manifestación de protesta dejó un saldo de más de 80 personas heridas (incluidas 2 pendientes de intervención quirúrgica y 2 heridas de gravedad) y 7 personas detenidas. 5 de ellos ya han sido liberados, como ha mostrado l’Antiga Massana en redes sociales. “Continuamos exigiendo la libertad de las dos personas detenidas en la manifestación de ayer por la noche”, añaden.
Durante toda la jornada de ayer, el centro de la ciudad estuvo fuertemente militarizado con un gran despliegue de efectivos de la Guardia Urbana de Barcelona (GUB) y los Mossos d’Esquadra, que incluyó “cientos de agentes antidisturbios y de paisano, varios drones, un helicóptero y más de una veintena de furgones”.
Esta mañana, l’Antiga Massana y la Organització Juvenil Socialista (OJS) han ofrecido una rueda de prensa conjunta en la que han denunciado “la ofensiva represiva vivida en la jornada de ayer, que comenzó con un desalojo ilegal y acabó con maniobras policiales para impedir y dificultar la movilización de protesta”. Según sus portavoces, se registraron “muchas escenas de brutalidad policial” y el número de personas heridas podría aumentar en las próximas horas. Para denunciar lo ocurrido, más de doscientas personas se han concentrado frente a la Ciudad de la Justicia, algunas de ellas mostrando imágenes de las lesiones causadas por los antidisturbios.
Los colectivos responsabilizan al gobierno del PSC de Jaume Collboni y Salvador Illa de una “ofensiva represiva” que, según han afirmado, fue “cuidadosamente planificada”. Denuncian además la existencia de un atestado policial de “300 páginas lleno de informaciones de la Brigada de Información de Mossos”, lo que, según el abogado de los detenidos, Martí Abril, evidencia “meses de investigación prospectiva a las organizaciones políticas y sociales detrás de l’Antiga Massana”. También ha señalado que ayer “agentes policiales hicieron controles en las entradas de los hospitales para identificar a los manifestantes con lesiones” y que llegaron incluso a acudir a los domicilios de algunos de ellos para identificarlos. Abril ha anunciado que presentarán “las demandas correspondientes contra algunos de los agentes implicados” y ha denunciado que “el ejercicio de los derechos políticos en nuestra sociedad es irreconciliable con el estado de excepción policial al cual someten a nuestras organizaciones y movimientos políticos”.
“La política parlamentaria es parte del problema”
Ariadna García, portavoz de l’Antiga Massana, ha declarado que “el desalojo de ayer solo es una muestra más del hecho de que Collboni, el PSC y todos los partidos políticos, tengan una cara más o menos amable, tienen el papel de mantener el beneficio de especuladores y empresarios a costa de asfixiar a la clase trabajadora y de evitar por todos los medios que nos organicemos”. Además, ha asegurado que “el desalojo se hizo de la única forma que podían hacerlo, de forma totalmente ilegal y sustentado a base de mentiras y difamaciones”. Para Garcia, l’Antiga Massana ha sido “un símbolo, una muestra de la potencia que tenemos cuando nos organizamos” y ha insistido en que “no acaba nada, hoy es un día más en el que se reafirma que la política parlamentaria no es parte de la solución sino parte del problema”. Finalmente, ha concluido que “contra la dictadura de políticos y empresarios, la única solución que tenemos es organizarnos para construir un poder de clase que sea capaz de superar el capitalismo en su totalidad”.
Por su parte, Judith González, portavoz de la Organització Juvenil Socialista (OJS) de Catalunya ha reafirmado su compromiso con la lucha y ha declarado que “el camino no ha sido fácil y no hay atajos”, pero que “asumimos el compromiso irrenunciable con la única vía capaz de superar este contexto de barbarie: la revolución socialista”. Ha subrayado que “nuestra tarea es dar una voz revolucionaria a nuestra clase, y que eso tome forma en cada conflicto, en cada golpe que sufre nuestra gente”. González ha denunciado la persecución política contra la OJS, señalando que “al menos 5 de las 7 personas detenidas son militantes de la OJS”, y tanto ella como Ariadna García han exigido “la liberación inmediata de todas las personas detenidas”.
